17-04-2010 (Teatro Opera)
Los doce años que pasaron desde la separación de Peligrosos Gorriones a la actualidad, no mellaron el sonido de la banda más representativa del rock platense de los 90, que el sábado último regresó "oficialmente" a los escenarios, ante unos 900 seguidores, en el Teatro Opera de esta ciudad.
Si bien algunos hits del grupo sonaron un poco fuera de contexto, Francisco Bochatón (Bajo y voz); Coda (guitarra); Rocky Velázquez (batería); y Martín Karakachoff, "Cuervo" (sintetizadores), demostraron que las buenas canciones no tienen fecha de vencimiento.
En un concierto que arrancó pasadas las 00.30 y se extendió por más de dos horas, la banda asestó un repertorio apoyado en sus dos primeros álbumes: Peligrosos Gorriones (1993), y Fuga (1995), aunque también hubo canciones de "Antiflash" (1997), que para muchos es el mejor disco de la banda.
Se abrió el telón, y en medio de una «bola de sonido» la silueta de Bochatón disparó: "Fiesta", con los acordes de fondo de "Cacería de caballos", el tema que abrió el recital.
El pogo se desató en el primer estribillo, y no se detuvo casi en ningún momento, excepto en algunas baladas, como "Nuestros días", que tuvo un final con arreglos algo jazzy a cargo del Cuervo. "Y me llevará lejos de acá", coreó el público.
"Escafandra" fue casi el único hit que tuvo la banda en el ámbito nacional -en parte, gracias a la rotación que tuvo en MTV- y así quedó plasmado en el show. De hecho, fue el tema más celebrado, junto a "Bicho reactor", "Cachavacha", "Serpentina", "Me extingo" y "Manicomio Gris".
Antes del show, el Cuervo estaba mezclado entre el público. Fue una noche de reencuentros, no sólo el de la banda con su público, sino el de toda una escena: la del rock platense de los 90.
El final con "Villancicos" y "Un ardiente beso" fue un cierre explosivo, que no dejó dudas en el auditorio. Faltaron, es cierto, temas cono "Viento castelar", o "El sol de Jaf".
Sobre el final del concierto, Bochatón protagonizó un "blooper", al caerse al piso, hecho que fue festejado por el público.
Este domingo 25 de abril la banda se presentará en Codigo País, en Avenida Libertador 4405 (Hipódromo de Palermo), a las 20. Según se informó, tras el show del domingo el grupo haría un parate, aunque no descartan grabar un nuevo disco.
El lugar de Peligrosos Gorriones en el rock argentino no está en discusión. Resta ver si la banda tiene una oportunidad en el panorama del rock actual. Dependerá de ellos.
Foto: Martín Raggio (http://www.musaplateada.blogspot.com/)
Los doce años que pasaron desde la separación de Peligrosos Gorriones a la actualidad, no mellaron el sonido de la banda más representativa del rock platense de los 90, que el sábado último regresó "oficialmente" a los escenarios, ante unos 900 seguidores, en el Teatro Opera de esta ciudad.
Si bien algunos hits del grupo sonaron un poco fuera de contexto, Francisco Bochatón (Bajo y voz); Coda (guitarra); Rocky Velázquez (batería); y Martín Karakachoff, "Cuervo" (sintetizadores), demostraron que las buenas canciones no tienen fecha de vencimiento.
En un concierto que arrancó pasadas las 00.30 y se extendió por más de dos horas, la banda asestó un repertorio apoyado en sus dos primeros álbumes: Peligrosos Gorriones (1993), y Fuga (1995), aunque también hubo canciones de "Antiflash" (1997), que para muchos es el mejor disco de la banda.
Se abrió el telón, y en medio de una «bola de sonido» la silueta de Bochatón disparó: "Fiesta", con los acordes de fondo de "Cacería de caballos", el tema que abrió el recital.
El pogo se desató en el primer estribillo, y no se detuvo casi en ningún momento, excepto en algunas baladas, como "Nuestros días", que tuvo un final con arreglos algo jazzy a cargo del Cuervo. "Y me llevará lejos de acá", coreó el público.
"Escafandra" fue casi el único hit que tuvo la banda en el ámbito nacional -en parte, gracias a la rotación que tuvo en MTV- y así quedó plasmado en el show. De hecho, fue el tema más celebrado, junto a "Bicho reactor", "Cachavacha", "Serpentina", "Me extingo" y "Manicomio Gris".
Antes del show, el Cuervo estaba mezclado entre el público. Fue una noche de reencuentros, no sólo el de la banda con su público, sino el de toda una escena: la del rock platense de los 90.
El final con "Villancicos" y "Un ardiente beso" fue un cierre explosivo, que no dejó dudas en el auditorio. Faltaron, es cierto, temas cono "Viento castelar", o "El sol de Jaf".
Sobre el final del concierto, Bochatón protagonizó un "blooper", al caerse al piso, hecho que fue festejado por el público.
Este domingo 25 de abril la banda se presentará en Codigo País, en Avenida Libertador 4405 (Hipódromo de Palermo), a las 20. Según se informó, tras el show del domingo el grupo haría un parate, aunque no descartan grabar un nuevo disco.
El lugar de Peligrosos Gorriones en el rock argentino no está en discusión. Resta ver si la banda tiene una oportunidad en el panorama del rock actual. Dependerá de ellos.
Foto: Martín Raggio (http://www.musaplateada.blogspot.com/)
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